Si bien las marcas encontraron una gran oportunidad de ganar visibilidad y posicionamiento en las redes sociales, no podemos olvidar que de determinada manera estamos invadiendo un espacio personal de los usuarios y que son éstos quienes deciden quien entra a sus preferencias y quien debe salir. Es por esto que las marcas deben procurar sonar cercanas, amigables, lograr que las personas piensen, sientan y hablen sobre nuestro concepto de marca. Una marca sin personalidad difícilmente generará recordación.
Pero, ¿cómo encuentro la personalidad de mi marca? Quiero compartirte algunos tips que he aprendido de la teoría de arquetipos de Carl Gustav Jung y del test Chino de Marca, los cuales te ayudarán a humanizar tu marca para lograr generar una relación de amistad con tus fans:
Piensa en tu marca como una persona: ¿Es hombre o mujer? ¿Qué edad tendría? ¿Qué nivel de educación tendría? ¿Qué hobbies tendría? ¿Qué carro tendría? ¿Qué talentos tendría? ¿Qué debilidad tendría? ¿Qué deseos tendría? ¿Tutearía? ¿Aconsejaría? ¿Sería un compinche?… Debemos pensar en todas esas preguntas que definen la personalidad de una persona, pues en últimas trataremos con personas.
Pregúntate qué pasaría si tu marca fuese otra cosa, es decir, y si mi marca fuese un animal, ¿cuál sería y por qué cualidades? Y si fuese una celebridad ¿Cuál sería y por qué? Y si fuese un color ¿Cuál sería y por qué significado? Y si fuese un superhéroe ¿Cuál sería y por qué características de la personalidad?… Hazte muchas comparaciones, todas te ayudarán a definir la personalidad de la marca.
Aprende de las grandes marcas, por ejemplo, Red Bull tiene una personalidad de aventurero y explorador, su target son personas a quienes les gusta lo extremo y sus más de cuatro millones de fans los siguen porque se identifican con su personalidad.